Del orgullo, el cambio de tono y la lucha que no empieza
La historia del bebé
que comenzó a ver tarde,
a hablar tarde,
y a ser escuchado tarde.
Se levantó,
y echó a caminar.
Un hueso quebró
y nadie lo levantó.
Aliento recogió
y lo volvió a intentar.
Cayó,
rezó
y premio:
No hay premio.
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